
Mandan a ICE tras migrantes en ciudades santuario
Agentes deteniendo a personas durante redadas federales.
Gobierno federal intensificará operativos en Nueva York y Los Ángeles tras ataque a agente
El gobierno de EU anunció una escalada en sus operativos migratorios en ciudades consideradas santuario, luego del ataque a un agente del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ocurrido en Manhattan. Las autoridades aseguran que este hecho refleja los riesgos generados por las políticas locales que, acusan, limitan la cooperación con las fuerzas federales.
Tom Homan, coordinador federal en temas migratorios, informó que se desplegarán más agentes en Nueva York y otras urbes con características similares. “Vamos a redoblar presencia en las calles y lugares de trabajo. Las ciudades santuario están por recibir justo lo que no quieren: más agentes federales”, dijo.
Sospechosos con antecedentes
El ataque ocurrió cuando el agente, fuera de servicio, fue interceptado por dos individuos en un parque de Manhattan. Al intentar ser asaltado, respondió con su arma de cargo y resultó herido durante el intercambio de disparos.
Uno de los presuntos agresores, Miguel Francisco Mora Núñez, fue localizado en un hospital del Bronx con heridas de bala. De acuerdo con el Departamento de Seguridad Nacional, había sido arrestado en cuatro ocasiones desde su ingreso legal a EU en 2023. El segundo implicado, Christhian Aybar Berroa, contaba con una orden de deportación emitida en 2023, tras haber ingresado en 2022 durante la administración de Joe Biden.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, cuestionó directamente la actuación de las autoridades locales. “No hay justificación para que individuos con ese historial sigan en libertad. Este ataque no debió ocurrir”, expresó. “Las políticas migratorias de la ciudad están poniendo en riesgo a los propios agentes”, añadió.
Retiro de marines en Los Ángeles
Mientras tanto, en California, el Pentágono confirmó el retiro de 700 marines desplegados en Los Ángeles, luego de considerar que se ha restablecido la estabilidad. La presencia militar fue parte de una estrategia para reforzar la aplicación de la ley federal en zonas donde los gobiernos locales limitan el accionar del ICE.
“El mensaje ha sido claro: no se tolerará la anarquía”, declaró Sean Parnell, vocero del Pentágono. “La disciplina, rapidez y profesionalismo de nuestras fuerzas contribuyeron a restablecer el orden. Misión cumplida”.



