
FMI eleva a 1% previsión de crecimiento para México
El organismo anticipa 1.5% en 2026 y advierte riesgos por aranceles e incertidumbre comercial
Ciudad de México, 22 de septiembre de 2025.— El Fondo Monetario Internacional (FMI) elevó su estimación de crecimiento económico para México en 2025, al pasar de 0.2% a 1.0%, en un contexto marcado por la debilidad del consumo interno y la incertidumbre en el comercio global.
En su informe anual sobre México bajo el Artículo IV, el organismo con sede en Washington anticipó que en 2026 la economía podría crecer 1.5%, ligeramente por encima del próximo año, aunque reiteró que persisten riesgos derivados de los aranceles y la política comercial con Estados Unidos.
Factores internos y externos
El FMI explicó que la consolidación fiscal, la política monetaria restrictiva y las tensiones comerciales han limitado la inversión y el gasto de los hogares, pero destacó que las exportaciones han mantenido resiliencia frente a un entorno adverso.
El informe señala que para 2026 se espera un repunte moderado del Producto Interno Bruto (PIB), con un avance de 1.5%. Sin embargo, advierte que la persistencia de aranceles y la incertidumbre en las relaciones comerciales pueden limitar el crecimiento y generar distorsiones en la asignación de recursos.
El FMI recomendó a México mantener la apertura comercial y evitar medidas proteccionistas que frenen la integración a las cadenas globales de suministro. Al mismo tiempo, llamó a priorizar inversiones en infraestructura en sectores clave como energía, transporte, telecomunicaciones y agua, con una mayor participación del sector privado y reglas claras que generen confianza en los inversionistas.
El organismo alertó que las finanzas públicas enfrentan una trayectoria desafiante. Estimó que el déficit fiscal de este año alcanzará 4.3% del PIB, por encima del 3.9% previsto, y proyectó que la deuda bruta podría llegar a 61.5% del PIB hacia 2030. Para reducir vulnerabilidades, sugirió un ajuste fiscal más ambicioso en el corto plazo que preserve el gasto social y la inversión pública, acompañado de una mayor movilización de ingresos mediante mejoras administrativas y cambios tributarios.
Entre sus propuestas, el FMI planteó avanzar en una reforma que incremente la progresividad del impuesto sobre la renta, elimine exenciones fiscales y amplíe gravámenes como el impuesto al carbono y las regalías mineras. También destacó la necesidad de reforzar la situación financiera de Pemex y la CFE, consideradas estratégicas para la estabilidad económica.
Finalmente, el organismo expresó preocupación por los recientes cambios en el sistema judicial y la desaparición de órganos autónomos, al considerar que pueden afectar la autonomía institucional y el clima de negocios. Afirmó que el éxito económico de México en el largo plazo dependerá de cerrar las brechas en infraestructura, fortalecer el Estado de derecho y consolidar una mayor integración comercial.