Cuernavaca impulsa producción local de Nochebuena

Más de 200 productores ornamentales cultivan un millón y medio de plantas en viveros de Tetela del Monte, Acapantzingo y Chapultepec para abastecer al país esta temporada.

El Ayuntamiento de Cuernavaca, a través de la Secretaría de Desarrollo Económico y Turismo (SDEyT), reafirmó su respaldo a la producción local de flores de Nochebuena, cultivo emblemático que impulsa la economía rural y preserva la tradición ornamental en la capital morelense.

Más de 200 productores integrados al sistema ornamental de Cuernavaca trabajan durante todo el año en la siembra, cuidado y distribución de plantas de temporada. Los viveros ubicados en Tetela del Monte, Acapantzingo y Chapultepec producen alrededor de un millón y medio de Nochebuenas en tamaños de 3 a 7 pulgadas, listas para comercializarse en diversos estados del país.

José Antonio Díaz Sandi, productor de Tetela del Monte, detalló que la preparación para esta temporada comienza desde abril, lo que permite que en noviembre inicie la venta de distintas variedades como Freedom y Prestige, disponibles en cerca de 20 colores, entre ellos rojo, mármol, blanco, salmón y rosa.

Explicó que las Nochebuenas provenientes de Cuernavaca no solo se venden en Morelos, sino que se distribuyen a ciudades como Puebla, Monterrey, Oaxaca, Guadalajara, Los Cabos, Ciudad de México, Estado de México y Durango, consolidando a la capital como referente nacional en producción ornamental.

El Gobierno municipal, encabezado por el alcalde José Luis Urióstegui Salgado, ha entregado insumos como macetas y fertilizantes para mejorar la calidad del cultivo y fortalecer la producción, garantizando que las plantas lleguen en óptimas condiciones al mercado nacional.

Los productores locales exhortaron a la ciudadanía a visitar los viveros y comprar directamente con ellos para apoyar la economía de las comunidades rurales, reconociendo el trabajo de las familias dedicadas a esta tradición navideña.

Con estas acciones, Cuernavaca fortalece la producción ornamental, promueve el consumo local y garantiza que la Nochebuena siga siendo un símbolo de identidad en la temporada decembrina.