Desde el comienzo de los Juegos Olímpicos de París, se han registrado 200 detenciones en la capital francesa y sus alrededores, según informó el ministro del Interior, Gérald Darmanin. Esta cifra refleja los esfuerzos de las autoridades para mantener la seguridad durante el evento deportivo internacional. Darmanin atribuyó la disminución de actos delictivos alrededor de las sedes olímpicas a la “hiperpresencia” de las fuerzas de seguridad, destacando que esta vigilancia intensiva ha sido efectiva en la prevención de incidentes.
El ministro también aseguró que hasta el momento no se ha detectado ninguna “amenaza clara” de atentado terrorista ni se ha identificado un plan de “atentado organizado”. Sin embargo, la policía ha detenido a individuos que podrían haber estado planificando ataques, lo que demuestra una vigilancia constante y una respuesta proactiva ante cualquier posible amenaza. Darmanin mencionó casos recientes, como el de un joven de 16 años arrestado en abril por amenazar en grupos de mensajería con cometer un ataque suicida, lo que subraya la importancia de monitorear y actuar sobre señales de radicalización.
Las autoridades francesas continúan tomando medidas estrictas para asegurar la tranquilidad y el éxito de los Juegos Olímpicos, en un esfuerzo por garantizar la seguridad de los atletas, visitantes y residentes de París. El enfoque en la seguridad ha sido un tema central, con un despliegue significativo de recursos para evitar cualquier incidente que pueda perturbar el desarrollo del evento.