A pesar de las manifestaciones y bloqueos en la Cámara de Diputados, el partido Morena ha reafirmado su decisión de aprobar la reforma judicial, incluso si es necesario trasladar la sesión a una sede alterna. Desde la madrugada, cientos de manifestantes han ocupado las instalaciones de San Lázaro, bloqueando todos los accesos y colocando pancartas en protesta contra la reforma. La movilización tiene como objetivo impedir que se discuta y vote la controvertida reforma que ha generado intensos debates en el país.
Ricardo Monreal, coordinador de la bancada de Morena, ha instado a los legisladores a no intentar ingresar al recinto para evitar cualquier confrontación con los manifestantes. Monreal subrayó que, aunque tienen el derecho de solicitar la intervención de la policía para despejar la zona, no ejercerán esa opción. «No queremos provocar un enfrentamiento, no vale la pena», declaró, reiterando el compromiso de Morena con la paz y el respeto al derecho de manifestación.
Sin embargo, Monreal también fue enfático al asegurar que la reforma judicial avanzará. Según el líder de Morena, se están considerando diversas opciones para llevar a cabo la sesión en otro lugar, fuera de la Cámara de Diputados, como podría ser un hotel. Esta medida busca garantizar que la discusión y votación de la reforma se realice sin interrupciones, manteniendo el proceso legislativo en marcha a pesar de las protestas.
El coordinador de Morena señaló que el compromiso del partido con la reforma judicial no es negociable, ya que responde al mandato recibido por el pueblo de México en las urnas. Monreal pidió comprensión a quienes no están de acuerdo con la reforma, pero enfatizó que Morena tiene un «contrato social» con la ciudadanía que debe cumplir. «Queremos discutir civilizadamente, con racionalidad política y con fundamentos», expresó, destacando la importancia de proceder con la reforma según lo planeado.
Finalmente, Monreal ofreció una disculpa a quienes se oponen al proyecto, reconociendo sus preocupaciones y el derecho a manifestarse. Sin embargo, insistió en que Morena tiene un deber con el electorado que los respaldó, y que la reforma judicial se llevará a cabo conforme a ese compromiso. Con la posible reubicación de la sesión, el partido busca asegurar que se cumplan los procedimientos democráticos, a pesar de los intentos de detener la reforma mediante protestas y bloqueos.