El sector financiero busca modernizar servicios, impulsar la bancarización y reforzar la educación financiera.
La Asociación de Bancos de México (ABM) presentó su estrategia rumbo a 2030, con el objetivo de reducir el uso de efectivo, ampliar el acceso al crédito y acelerar la digitalización de los servicios financieros.
Emilio Romano, presidente de la ABM, informó que el 74 % de las transacciones mayores a 500 pesos aún se realiza en efectivo, lo que representa un riesgo para los usuarios, dificulta la trazabilidad y limita la capacidad del Estado para fortalecer la recaudación fiscal.
Actualmente, el 76.5 % de la población mexicana cuenta con al menos un producto financiero formal. Sin embargo, solo 37.3 % accede a crédito, mientras que 63 % posee productos de captación, como cuentas de ahorro.
Ante esta baja penetración del crédito, el sector propone reforzar los distintos segmentos mediante acuerdos con autoridades y banca de desarrollo.
Otro desafío señalado es la falta de cultura financiera: solo 6 % de la población ha tomado algún curso en finanzas personales, lo que limita el uso efectivo de los servicios disponibles.