Libre “Lord Pádel”; esposa e hijo siguen presos
El empresario y su socio enfrentarán el proceso en libertad.
Tlalnepantla, Méx., – La polémica en torno al caso de “Lord Pádel” dio un giro este lunes, cuando la jueza de control Paulina Piña ordenó la liberación inmediata de Alejandro Germán “N” y su socio Othón “N”, beneficiados por una suspensión provisional federal que dejó sin efecto la orden de aprehensión en su contra.
La decisión fue tomada en una audiencia celebrada en los juzgados del penal de Barrientos, donde ambos habían ingresado tras ser capturados el 14 de agosto en el aeropuerto de Cancún. Con el fallo, los empresarios abandonaron el reclusorio y regresaron al tribunal como imputados en libertad, en un proceso donde se les acusa de homicidio en grado de tentativa.
La determinación judicial no alcanzó a Karla Alejandra “N” y Germán “N”, esposa e hijo de “Lord Pádel”, quienes permanecerán bajo prisión preventiva. Ambos están acusados de participar en la violenta agresión contra un instructor deportivo, ocurrida el 19 de julio en un club de Atizapán de Zaragoza y que fue difundida en redes sociales, desatando una ola de indignación pública.
El video, ampliamente compartido, mostró a los implicados golpeando al entrenador Israel Morales, mientras proferían amenazas de muerte. Las imágenes detonaron protestas virtuales y una exigencia social de justicia que ahora se enfrenta al contrapeso de la estrategia legal de la defensa.
El otorgamiento del amparo por parte del Juzgado Décimo Cuarto de Distrito en Naucalpan ha sido cuestionado por la Fiscalía mexiquense, que adelantó su intención de impugnar la liberación. De acuerdo con la representación social, existen irregularidades en la notificación de la suspensión y en el cumplimiento de las garantías procesales.
La audiencia se desarrolla a puerta cerrada, a petición de la defensa, que argumentó que la cobertura mediática ha “criminalizado” a los imputados. Pese a ello, la discusión sobre el caso se mantiene viva en la opinión pública, donde se contrasta la rapidez con la que surtió efecto el amparo frente a la severidad con la que se trata a otros acusados sin capacidad de acceso a recursos legales similares.
Con este fallo, el caso se fragmenta: mientras dos acusados enfrentan el proceso en libertad, otros dos seguirán tras las rejas, a la espera de que el tribunal determine si existen elementos suficientes para su vinculación formal a proceso.
