
Oootra marcha contra la gentrificación
Colectivos vecinales vuelven a tomar las calles de CDMX para denunciar el despojo urbano, el turismo digital y la especulación inmobiliaria.
Ciudad de México.– Con pancartas que decían “Aquí vivía mi abuela”, “No más Airbnb” y “Vecinas sí, turistas no”, se realizó este sábado 26 de julio la tercera marcha en menos de un mes contra la gentrificación en la capital. El punto de partida fue el Hemiciclo a Juárez, pero debido al cerco policial, el contingente se desvió hacia el Zócalo.
La protesta fue organizada por colectivos como el Frente Antigentrificación MX y Asamblea Roma-Condesa, quienes denuncian que las autoridades han entregado los barrios a los intereses del turismo y las plataformas digitales, desplazando a quienes han vivido ahí toda su vida.
La manifestación se da en medio de una escalada de precios: tan solo en la colonia Roma, el costo promedio de renta ha subido 66 % en los últimos dos años, impulsado por la conversión masiva de viviendas en alojamientos temporales.
Y aunque la narrativa oficial promueve la llegada de nómadas digitales como impulso económico, las vecinas exigen equilibrio: “No estamos contra la movilidad, estamos contra un modelo de ciudad que expulsa al que no puede pagar en dólares”, dijeron durante la marcha.
🌍 ¿Qué ha pasado en otras ciudades?
- Barcelona: prohibió Airbnb sin licencia y recuperó vivienda para residentes.
- Lisboa: frenó permisos de alquiler turístico y apostó por vivienda social.
- Medellín: intenta convivir con nómadas digitales mediante modelos mixtos, pero sigue enfrentando desplazamiento silencioso en barrios históricos.
CDMX, en cambio, firmó en 2022 un acuerdo con Airbnb sin consulta ciudadana. Y aunque la jefa de Gobierno Clara Brugada presentó un plan de 14 puntos para regular las rentas, aún no se concreta.
Durante la movilización, autoridades de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX informaron que un grupo ajeno a los colectivos intentó infiltrarse con bombas molotov, gasolina y martillos para provocar destrozos. Los agentes aseguraron el material e impidieron que se desatara la violencia, permitiendo que la protesta contra la gentrificación continuara de forma pacífica.