Desde la noche del 24 de julio, varias sucursales de tiendas y gasolineras Oxxo en Nuevo Laredo, Tamaulipas, han cerrado debido a la creciente violencia en la región. La empresa tomó esta decisión como medida de precaución para garantizar la seguridad de sus empleados y clientes.
La situación en Nuevo Laredo ha empeorado, con reportes de enfrentamientos y actos delictivos que han generado un ambiente de inseguridad. Ante esta situación, Oxxo decidió suspender temporalmente sus operaciones en varias de sus ubicaciones, tanto de tiendas de conveniencia como de estaciones de servicio, para evitar riesgos mayores.
El cierre de estas sucursales afecta a la comunidad local, que depende de estos establecimientos para sus necesidades diarias. Sin embargo, la empresa ha manifestado su compromiso de reanudar operaciones tan pronto como las condiciones de seguridad lo permitan. En un comunicado, Oxxo expresó su solidaridad con las personas afectadas por la violencia y su intención de colaborar con las autoridades para restablecer la tranquilidad en la zona.
Las autoridades locales y estatales están trabajando para controlar la situación y restablecer el orden en Nuevo Laredo. Mientras tanto, se recomiend