A solo unos días de asumir la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump volvió a atacar a México, afirmando que el país está “esencialmente dirigido por los cárteles” del narcotráfico.
En una conferencia de prensa desde su residencia en Mar-a-Lago, Trump declaró que México “tiene muchos problemas” y que es “un lugar muy peligroso” debido al control que ejercen los grupos criminales, aunque prometió que esta situación cambiará “muy pronto”.
“No podemos permitir que eso continúe; México está realmente en problemas, muchos problemas”, afirmó el republicano, mientras el Congreso de Estados Unidos comienza a planear proyectos de ley relacionados con migración y control fronterizo.
El próximo presidente estadounidense, quien ha advertido en repetidas ocasiones que su país catalogará a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas, ha sostenido que la estructura del narcotráfico es la que realmente gobierna el país. “El problema es que México está petrificado ante los cárteles porque pueden remover al presidente en dos minutos”, expresó Trump durante una entrevista con Jesse Watters de Fox News en octubre pasado.
Su discurso ha sido respaldado por el vicepresidente electo de EE. UU., J. D. Vance, quien advirtió que si su país no se ocupa de los cárteles de la droga, México podría convertirse en un narcoestado.
“Verdaderamente creo que el gobierno mexicano, aunque no pueda decirlo, desea que el presidente Trump actúe contra los cárteles, porque ese veneno también está desestabilizando a su país”, comentó en esa ocasión.