El secretario de Guerra, Pete Hegseth, informó que el Ejército estadounidense destruyó dos embarcaciones en el Pacífico oriental, en ataques autorizados por el presidente Donald Trump. Con esta operación, suman más de 70 muertos y 20 barcos hundidos desde septiembre.
Washington, 10 de noviembre de 2025. — El secretario de Guerra de Estados Unidos, Pete Hegseth, informó este lunes que el Ejército estadounidense hundió dos lanchas en aguas del Pacífico oriental, en operaciones militares que dejaron seis presuntos “narcoterroristas” muertos.
“Ayer, por orden del presidente Donald Trump, se llevaron a cabo dos ataques cinéticos letales contra embarcaciones operadas por Organizaciones Terroristas Designadas”, detalló Hegseth en un mensaje publicado en la red X, acompañado de un video de los ataques.
Yesterday, at the direction of President Trump, two lethal kinetic strikes were conducted on two vessels operated by Designated Terrorist Organizations.
These vessels were known by our intelligence to be associated with illicit narcotics smuggling, were carrying narcotics, and… pic.twitter.com/ocUoGzwwDO
De acuerdo con el jefe del Pentágono, los servicios de inteligencia confirmaron que las embarcaciones estaban vinculadas al contrabando de narcóticos y transportaban estupefacientes en una ruta marítima de tráfico de drogas del Pacífico oriental.
“Ambos ataques se realizaron en aguas internacionales y tres narcoterroristas se encontraban a bordo de cada embarcación. Los seis murieron”, añadió Hegseth, quien destacó que no hubo bajas ni heridos entre las tropas estadounidenses.
Campaña militar en expansión
Con estas nuevas acciones, Estados Unidos suma más de 70 presuntos narcotraficantes abatidos y una veintena de embarcaciones destruidas como parte de la campaña contra el tráfico de drogas que la administración de Donald Trump lanzó en septiembre en aguas del Caribe y que posteriormente se amplió al Pacífico.
La operación es considerada por analistas como el mayor despliegue naval estadounidense desde la primera Guerra del Golfo (1990-1991). Actualmente, Washington mantiene ocho buques de guerra —seis de ellos destructores—, tres buques anfibios y un submarino en la región.
Además, el portaaviones nuclear Gerald R. Ford, el más grande y moderno de la flota estadounidense, se dirige al Caribe como parte del refuerzo de la ofensiva marítima.
Rechazo regional y debate político interno
La estrategia ha generado rechazo por parte de los gobiernos de Venezuela y Colombia, países que Washington acusa de estar involucrados en redes de narcotráfico.
En el Congreso estadounidense, una iniciativa demócrata para limitar la campaña militar fracasó la semana pasada, al obtener 49 votos a favor y 51 en contra, con la bancada republicana cerrando filas en apoyo a Trump.
“Bajo el mandato del presidente Trump, estamos protegiendo la patria y eliminando a estos terroristas del narcotráfico que pretenden dañar a nuestro país y a su gente”, enfatizó Hegseth al defender la operación.