
Rodrigo Paz gana la segunda vuelta presidencial en Bolivia
El economista tarijeño obtuvo el 54.5 % de los votos frente a Jorge “Tuto” Quiroga y pondrá fin a más de veinte años de hegemonía del Movimiento al Socialismo. Asumirá el 22 de enero de 2026 con el reto de estabilizar la economía y reconciliar al país.
La Paz, Bolivia | 19 de octubre de 2025
El economista y exalcalde de Tarija, Rodrigo Paz Pereira, se convirtió este domingo en el nuevo presidente de Bolivia, tras ganar la segunda vuelta electoral con 54.5 % de los votos frente a 45.4 % de su rival, el expresidente Jorge “Tuto” Quiroga, según el Tribunal Supremo Electoral (TSE).
Su triunfo marca un giro histórico en la política nacional y el cierre de más de dos décadas de hegemonía del Movimiento al Socialismo (MAS), fundado por Evo Morales, que gobernó Bolivia desde 2006 bajo un modelo populista y de fuerte intervención estatal.
Un nuevo liderazgo para una Bolivia polarizada
Con 49 años, Rodrigo Paz representa una generación de políticos que busca reconciliar a un país dividido por la confrontación ideológica. Hijo del expresidente Jaime Paz Zamora, alcanzó la presidencia al frente de la coalición centrista Alianza por la Renovación Nacional (AREN), impulsada por el Partido Demócrata Cristiano (PDC).
Durante su campaña, Paz prometió “unidad sin odio” y un gobierno de reconstrucción institucional.
“Bolivia puede reconciliarse y salir adelante sin miedo ni rencores. Hoy empieza un nuevo tiempo para nuestro país”, declaró desde la plaza Murillo, en medio de una multitud que celebraba su victoria.
El fin de la era del MAS
El triunfo de Paz pone fin al ciclo del MAS, que durante casi 20 años consolidó un modelo político basado en la renta del gas, el protagonismo indígena y la figura de Evo Morales. Sin embargo, los escándalos de corrupción, el deterioro económico y las fracturas internas desgastaron a la organización.
Morales reconoció la derrota y llamó a una “reflexión profunda dentro del movimiento popular”. Dirigentes regionales del MAS advirtieron que se mantendrán como oposición “crítica, pero responsable”.
Desafíos económicos y políticos
El nuevo mandatario asumirá el 22 de enero de 2026 en un contexto económico adverso. Bolivia enfrenta inflación alta, escasez de divisas y un desplome de las reservas internacionales, según el Banco Central de Bolivia.
Paz ha prometido reactivar la inversión, diversificar la matriz productiva y fortalecer la independencia judicial.
“El voto a Paz es un voto de esperanza más que ideológico. Su éxito dependerá de su capacidad para gobernar sin mayoría absoluta”, señaló la analista María René Burgos.
De Tarija al Palacio Quemado
Exalcalde de Tarija (2015–2021), Paz se destacó por sus programas de transparencia y desarrollo urbano. Economista de formación y diplomático de carrera, estudió en Estados Unidos y participó en organismos internacionales antes de entrar de lleno en la política nacional.
Su perfil moderado y su estilo conciliador le granjearon apoyos en diversos sectores sociales, desde empresarios hasta jóvenes universitarios.
Reacciones internacionales
Gobiernos de Argentina, Chile, Brasil, Estados Unidos y la Unión Europea felicitaron al presidente electo por el proceso pacífico y ordenado.
La presidenta argentina Claudia Sheinbaum lo calificó como “una muestra de madurez democrática en la región”.
Desde la OEA, Luis Almagro destacó que “Bolivia reafirma su compromiso con la democracia y la paz social”.
Un mensaje de reconciliación
En su primer discurso como presidente electo, Paz lanzó un mensaje inclusivo:
“No hay vencedores ni vencidos; hay un solo país que se llama Bolivia. Gobernaremos con todos y para todos.”
Mientras la noche caía sobre La Paz, miles de bolivianos coreaban una misma consigna: “Volver a creer.”