La compañía SpaceX, dirigida por Elon Musk, suspendió este domingo el vuelo de prueba de su megacohete Starship debido a una falla en los sistemas en tierra. El anuncio se dio apenas 15 minutos antes de la hora prevista para el lanzamiento desde la base en el sur de Texas.
Con 123 metros de altura, Starship es considerado el vehículo de lanzamiento más grande y poderoso jamás construido. Su misión es fundamental para el regreso de astronautas estadounidenses a la Luna y pieza clave del ambicioso plan de Musk de colonizar Marte.
El lanzamiento estaba programado para las 18:30 horas locales, pero SpaceX informó que “se descarta el décimo vuelo de Starship de hoy para dar tiempo a solucionar un problema con los sistemas en tierra”. El mensaje fue publicado a través de su cuenta oficial en X.
La cancelación representa un nuevo revés en el programa, luego de que pruebas previas terminaran en explosiones que lanzaron escombros al Caribe y ocasionaron interrupciones en vuelos comerciales. Estos incidentes han generado mayor presión para que la compañía logre una prueba sin contratiempos.
A pesar del contratiempo, en el portal oficial de la empresa apareció una nueva cuenta regresiva, lo que sugiere que un nuevo intento de lanzamiento podría realizarse el lunes, aunque no se ha confirmado de manera oficial.
El Starship está diseñado para ser reutilizable y transportar tanto carga como tripulación a destinos más allá de la órbita terrestre, convirtiéndose en una pieza central del futuro de la exploración espacial.