La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo criticó la estrategia de combate al narcotráfico declarada durante el gobierno del expresidente Felipe Calderón, calificándola como “la decisión más autoritaria e irresponsable de los últimos sexenios”.
“¿Quién declara una guerra en su propio país? ‘Guerra’ significa ‘permiso para matar’. Declarar la guerra implica que las leyes quedan en segundo término, instaurando un régimen de excepción”, afirmó Sheinbaum, señalando que la medida desvió gravemente al país del Estado de derecho.
En su crítica, la mandataria cuestionó el uso del Ejército bajo una estrategia que, según señaló, priorizó el enfrentamiento directo sobre la justicia: “El tema era matar. Mátalos en caliente. ¿Cuál juicio? ¿Cuál Estado de derecho? No se trataba de detener y procesar conforme a la ley, sino de actuar bajo la presunción sin pruebas”.
Sheinbaum destacó los daños sociales que esta estrategia dejó en el país, enfatizando que representó una grave desviación de la legalidad y fomentó la violencia en lugar de contenerla.
Además, la presidenta señaló las acusaciones contra Genaro García Luna, extitular de Seguridad Pública durante el sexenio de Calderón, quien fue vinculado al narcotráfico. “El encargado de esa estrategia favorecía a unos delincuentes frente a otros, recibía dinero y promovía secuestros”, apuntó.
Estas declaraciones subrayan las críticas al modelo de seguridad adoptado durante aquel periodo y refuerzan el enfoque actual de privilegiar estrategias de pacificación basadas en el fortalecimiento del tejido social.