El R1 y la célula que alcanzó a Manzo

Ramón Álvarez Ayala, operador del CJNG y líder de Los Cannabis, fue pieza central en la confrontación que terminó alcanzando al exalcalde de Uruapan.

Ramón Álvarez Ayala, conocido como El R1, es considerado uno de los operadores de mayor jerarquía dentro del Cártel Jalisco Nueva Generación, con influencia directa en Michoacán y la zona metropolitana de Jalisco. Su presencia en la estructura criminal se fortaleció tras recibir el respaldo directo de Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, para coordinar operaciones clave del grupo.

El R1 fue detenido por primera vez en 2012 junto con sus hermanos, Rafael (El R2) y Jesús Santiago Álvarez Ayala. Pese a que se les atribuían delitos como secuestro y delincuencia organizada, los tres quedaron en libertad en 2022, luego de que un juez considerara insuficientes los elementos presentados en su contra.

Tras su liberación, Álvarez Ayala retomó su papel dentro del cártel y consolidó el control de una célula llamada Los Cannabis, con base en Uruapan. Este grupo armado se convirtió en uno de los principales objetivos del entonces presidente municipal, Carlos Manzo, quien encabezó múltiples operativos para frenar su influencia en la región.

Durante meses, Manzo impulsó acciones policiales tanto en zonas urbanas como en la sierra del municipio. Fue en uno de esos operativos donde la policía municipal detuvo sin realizar un solo disparo a René Belmonte Aguilar, conocido como El Rhino, jefe de plaza de Los Cannabis y hombre cercano a El R1.

El alcalde difundió la captura de El Rhino en una transmisión en vivo, donde mostró al detenido con la cabeza cubierta, además del dinero, armas y dispositivos tecnológicos asegurados. La exposición pública del golpe al cártel incrementó la tensión entre el municipio y la organización criminal.

Este episodio ocurrió apenas dos meses antes del asesinato de Carlos Manzo, crimen que investigaciones locales aún vinculan con el actuar de Los Cannabis, la célula creada y dirigida bajo la protección de El R1.

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