Escándalo en Argentina: policía usó a presos como meseros y cocineros en su boda

Un caso insólito y polémico sacude a Argentina: un policía utilizó a cuatro presos para cocinar, servir y limpiar durante su propia boda en Lonquimay, a unos 600 kilómetros al oeste de Buenos Aires.

El hecho ocurrió en mayo del año pasado cuando el inspector Cristian Martín Galván celebró su matrimonio a una cuadra de la comisaría local. Los detenidos caminaron libremente hasta el salón de fiestas, donde uno de ellos incluso se encargó de asar el cordero, y tras terminar las labores, regresaron por su cuenta a su lugar de detención.

“Iban y venían caminando, algunos lo hicieron varias veces durante la jornada”, relató el fiscal de la causa, Guillermo Sancho, quien confirmó que ninguno de los presos intentó fugarse.

Este lunes, Galván fue condenado a un año y tres meses de prisión en suspenso por abuso de autoridad. La defensa argumentó que estaba de licencia por matrimonio y, por tanto, no ejercía mando ese día, pero el juez desechó el planteo.

Durante el juicio, uno de los presos declaró que el oficial, estudiante de veterinaria, también le pedía favores personales, como atender a su perro y a su caballo.

“Tuvo suerte de que ninguno se fugara”, subrayó el fiscal, quien aclaró que los detenidos no cometieron delito alguno, pues solo cumplieron con la orden.