¿Por qué engañamos? Esther Perel explica el vacío emocional tras las infidelidades

Después de escuchar a miles de parejas en crisis durante más de cuatro décadas, la renombrada terapeuta y escritora belga Esther Perel ha llegado a una conclusión inquietante: muchas personas no engañan por deseo sexual o aburrimiento, sino por una sensación de “muerte interior” dentro de la relación.

En una entrevista reciente con The Telegraph, Perel, quien ha trabajado por más de 45 años como sexóloga y psicoterapeuta, explicó que las infidelidades suelen ser una búsqueda de vitalidad, una necesidad de reconectar con la sensación de estar vivos. “A veces tiene que ver con la relación: rechazo, traición, desconexión o alienación. La soledad es una causa muy común”, comentó. “Otras veces, los motivos son internos y no tienen nada que ver con la pareja”.

Para Perel, el hilo conductor en la mayoría de los casos es esa “muerte emocional” que se infiltra lentamente. Es cuando la intimidad se vuelve rutina, y la pasión queda ahogada por la familiaridad doméstica. En esos casos, las personas no necesariamente dejan de amar a su pareja, pero sí dejan de sentirse vivas.

Su propuesta para contrarrestar esto es cultivar la “vitalidad” en la relación, que vincula con la curiosidad y con lo que llama “diferenciación”. Es decir, ver a la pareja con ojos nuevos, como si no se le conociera por completo. “Hay que abrirse a la posibilidad de que no sabes todo sobre tu pareja”, señala.

Perel destaca que la vida en pareja no debe reducirse a las rutinas cotidianas como recoger a los hijos, hacer la despensa o ver series repetidas en streaming. Sugiere crear espacios para el juego y la espontaneidad: desde compartir historias raras, probar una receta nueva o iniciar un ritual semanal, hasta hacer algo juntos que resulte desconocido para ambos.

Otro punto clave de su análisis es abandonar la fantasía de que la pareja ideal es un espejo de uno mismo. “No puedes hacer que alguien sea exactamente como tú”, afirma. “Debes aceptar las diferencias, entender que tu pareja puede hacer algo importante para ti aunque no le interese, y viceversa”.

En resumen, según Perel, muchas personas que engañan no están buscando a otra persona. Se están buscando a sí mismas. Y esa búsqueda de autenticidad y emoción no empieza cambiando al otro, sino reavivando el propio deseo y la capacidad de asombro.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *